Art déco en la Tabacalera

El art déco en la Tabacalera refleja la modernidad que continua irradiando este innovador estilo arquitectónico. Así que recorrer la colonia es garantía de encontrar detalles, acabados e incluso edificios inspirados en este movimiento.

 

Art déco en la Tabacalera

Art déco en la tabacalera: Frontón México (2017). © Frontón México Centro de Entretenimiento

Hablar de art déco es hablar de un estilo de contrastes: por un lado, elegante y opulento; y por otro, funcional y modernista. Ecléctico y monumental, se caracteriza por integrar estilizados diseños geométricos. Así, abstracciones de la naturaleza y motivos prehispánicos conviven con materiales como el mármol, el vidrio y el acero.

Adicionalmente, la relación entre urbanismo, arquitectura y  ciudad es de gran relevancia para el art déco. La intrínseca relación de estos conceptos propone una arquitectura social. De ahí que en el art déco la arquitectura, además de admirarse, se habite.

Resumiendo: el art déco en la tabacalera añadió a los edificios y al trazo urbano un aspecto más moderno; y contribuyó a que inmuebles como Frontón México se consolidarán como puntos de encuentro social y de referencia.

Además de Frontón México, el art déco en la Tabacalera se puede contemplar en tres edificios de igual importancia: el Monumento a la Revolución, el Edificio de la Alianza Ferrocarrilera y El Moro. En la actualidad, estos iconos arquitectónicos siguen siendo importantes escenarios que enriquecen y dan vida a la colonia Tabacalera.

 

Monumento a la Revolución
Art déco en la Tabacalera: Monumento a la Revolución

Monumento a la Revolución (2017). © Tamara Ramírez para Frontón México

El trazo original proponía la construcción de un Palacio Legislativo de estilo afrancesado; sin embargo la construcción se detuvo cuando inició la Revolución Mexicana. En los 30 el arquitecto Carlos Obregón Santacilia retomó el proyecto y lo transformó en el Monumento a la Revolución.

Esta arquitectura monumental se encuentra inmersa en un espacio urbano de encuentro social: la Plaza de la República. Su estilo art déco convive con piedra volcánica y piedra de cantera; sus columnas resguardan los restos de Carranza, Madero, Elías Calles, Cárdenas y Villa; y posee un doble arco en cantera y cobre patinado.

 

Frontón México
Art déco en la Tabacalera: Frontón México

Frontón México (2017). © Tamara Ramírez para Frontón México

Diseñado por Joaquín Capilla y Teodoro Kunhardt en 1921, fue inaugurado el 10 de mayo de 1929 como Frontón México. Durante el siglo XX fue uno de los puntos de encuentro social más importantes de la élite capitalina. Para ingresar era indispensable ir ataviado de rigurosa etiqueta, por lo que se habilitó la renta de sacos y corbatas.

Sobriedad, geometría, remates escalonados, puertas ochavadas, mármol, granito, acero, vidrio, concreto: el art déco en todo su esplendor. El Palacio de la Pelota fue sede de la despedida de Pablo Neruda (1943) y de las Olimpiadas en 1968. También fue tema y locación de la película La noche avanza (1951) de Roberto Gavaldón.

Como el Jai alai, la presencia y expresión del diseño arquitectónico de Frontón México es sofisticado, singular e inimitable.

 

Edificio de la Alianza Ferrocarrilera
Art déco en la Tabacalera: Alianza de Ferrocarrileros Mexicanos

Alianza de Ferrocarrileros Mexicanos (2008). © Jaime Aldaraca vía discursovisual.net

El Antiguo Sindicato de Ferrocarrileros se ubicó en la calle Ponciano Arriaga #20; y fue realizado por Vicente Mendiola Quezada, Carlos Greenham y Luis Alvarado en la década de 1920.

Los planos verticales que predominan en su geometría generan una continuidad escalonada; mientras que los vanos de las ventanas y su composición exaltan el volumen de cada elemento arquitectónico. En el acceso principal del inmueble se puede apreciar otra característica del estilo art déco: el nombre del edificio grabado; y la combinación de elementos geométricos definidos con motivos orgánicos, decorando en el cancel del ingreso.

 

Edificio El Moro
Art déco en la Tabacalera: Edificio El Moro

El Moro. Fotografía vía mxcity.mx

Emblemático, imponente y vanguardista, este edificio es la sede de la Lotería Nacional. El acero, el cristal y el concreto, materiales representativos del art déco, refuerzan la verticalidad de El Moro.

En 1946 fue el edificio más alto de la Ciudad de México y el primer rascacielos de la capital. Con una altura de 107 m y 29 plantas, el Moro cuenta con 22,000 m2 de oficinas. También fue el primer edificio en el mundo en tener una cimentación conocida como Sistema de Flotación Elástica; gracias a ésta, el edificio es considerado el más seguro y resistente a terremotos.

Autor
Tamara Ramírez
Lead Editor
Comments

Deje un comentario