11 secretos de la Tabacalera

Frontón México es pasado y presente: las historias de la colonia que lo albergan son tan interesantes como los nombres de sus calles, edificios y protagonistas. ¿Conoces los secretos de una de las colonias más representativas de la Ciudad de México?

La colonia Tabacalera a principios del siglo XX.

Secretos de la tabacalera

1. De Mazatziutamalco a la Tabacalera

Antes de la llegada de los españoles, el espacio que ocupa hoy la colonia Tabacalera se conocía como Mazatziutamalco. Posteriormente, durante la colonia, recibió el nombre de Zapotlán y Barrio del Calvario. La Tabacalera recibe su nombre de la fábrica Tabacalera Mexicana Basagoiti Zaldo y Cía., la cual se ubicó en el Palacio de Buenavista en 1898. Desde 1968 el Palacio es sede del Museo Nacional de San Carlos y el inmueble se atribuye  a Manuel Tolsá.

2. Puente de Alvarado

Según las crónicas de la colonia en el cruce actual de las calles Puente de Alvarado y Jesús Terán se encontraba una acequia —un canal o zanja por el que pasa agua— que Pedro de Alvarado saltó durante la Noche triste.

3. El baile de los 41

Tras una redada en la que se encontraban 41 hombres de la alta clase porfiriana, 22 vestidos de hombres y 19 de mujer, el número 41 se empezó a asociar a la homosexualidad. Se cree que uno de los detenidos era el yerno de Porfirio Díaz. El escándalo fue inmortalizado por los periódicos e incluso existe un grabado realizado por José Guadalupe Posadas.

4. Espacio de trabajadores

La cercanía de la Estación Buenavista, punto de encuentro de ferrocarrileros; la sede del PNR (Partido Nacional Revolucionario); las cigarreras de la Tabacalera Mexicana Bsagoiti Zaldo y Cía.; los pelotaris de Frontón México; los trabajadores de la Lotería Nacional; así como los de los periódicos de la zona integraron el contexto social que dio vida a la colonia entre los años 30 y 50.

5. Frontón México

Inaugurado en 1929 y de estilo art decó, en su época de mayor esplendor fue el punto de reunión de la élite capitalina: escritores, actores, políticos y deportistas se dieron cita en este inmueble al cual sólo se podía ingresar vestido de etiqueta, motivo por el cual afuera del recinto se encontraba un local que rentaban corbata.

6. Monumento a la Revolución

El Palacio Legislativo es uno de tantos proyectos que quedo inconcluso durante la Revolución Mexicana. Cuando el arquitecto Obregón Santacilia, bisnieto de Benito Juárez, retomó el proyecto en la década de 1930 modificó el diseño y en la actualidad en este espacio se encuentro el Monumento a la Revolución, cuyas obras se llevaron a cabo entre 1933 y 1938.

7. Edificio del Sindicato Mexicano de Electricistas

El Sindicato estableció su sede en la calle Artes #45, ahora Antonio Caso en los 30. Este inmueble fue intervenido de forma colectiva por David Alfaro Siqueiros, José Renau, Antonio Pujol y Luis Arenal. El resultado fue el mural Retrato de la Burguesía (1939-40), que refleja la lucha de los trabajadores contra el capitalismo.

8. El Moro

107 metros de altura y estilo art decó. “El Moro”, sede de la Lotería Nacional desde 1946, debe su nombre a su diseño pues semeja una tienda morisca. Además, en su época innovó por ser el 1^er edificio en Latinoamérica en tener un letrero de gas neón. Y gracias al Sistema de Flotación Elástica de su cimentación, ha soportado 5 terremotos.

9. La Revolución de una isla

En 1955 Fidel Castro y el Che Guevara se conocieron en la colonia tabacalera: para ser más exactos, en la calle Emparán #49, justo atrás del Museo Nacional de San Carlos. Se cree que fue ahí en donde empezaron a planear la Revolución de Cuba.

10. Urbanismo no tradicional

La arquitectura que sostiene e integra una colonia suele verse reflejada en la presencia de al menos una escuela, un mercado y una iglesia… Las cuales brillan por su ausencia en la Tabacalera: colonia que se hizo conforme se fue habitando. El giro comercial y laboral de sus inmuebles responde a las necesidades de primera mitad del siglo XX.

11. La vida bohemia: la colonia que nunca duerme

Escritores, artistas y actores como Juan Rulfo, Pablo Neruda, Nellie Campobello, Cantinflas, “La Doña”, entre otros, se dieron cita en distintos espacios de la Tabacalera, incluyendo Frontón México. Desde el siglo XX las actividades y la vida nocturna que ofrecía el espacio delimitado por Puente de Alvarado, Reforma e Insugentes ha fascinado a los habitantes de la ciudad. Sumado a las actividades que se realizaban durante el día en las fábricas, periódicos y la estación del tren, la colonia Tabacalera estaba activa casi las 24 horas del día.

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